SOBRE MI

MI HISTORIA

La pintura en mi vida es tan importante como dormir o comer.

Soy exahustiva en la investigación de técnicas pictóricas y me nutro también de la fotografía, el cine, la música, la literatura y la propia realidad cotidiana.

Me mueve la pasión por la pintura.

Mis pinturas, surgen de la necesidad inevitable por plasmar en el lienzo imágenes y sentimientos que emergen del subconsciente, materializándose en obras tangibles que recorrieron un largo camino antes de ver la luz.

Soy autodidacta en cuanto a la encaùstica se refiere.

En el camino encontrè a los pintores Rusos, Franceses y Españoles, Latinoamericanos, Estadounidesnses y otros pocos

especializados en el manejo de la encaùstica (tristemente ninguno mexicano), me gusta tanto o más, el proceso que la obra terminada. Para mí, cocinar la pintura es alquimia pura, me remite a la escencia de la vida.

Los olores de la cera y la resina al fundirse, me recuerdan mi fragilidad y el nacimiento. Los pigmentos naturales son fascinantes por su intensidad, la maleabilidad del medio y el uso del fuego para fundir, unir, crear, dar forma construir y destruir, completan, desde mi punto de vista, un proceso de creación orgánico, honesto, y que sobre todo, devela el alma del que crea. Soy obsesiva y trabajo jornadas de hasta 13 horas, en lo que es hoy, mi pasión y purga emocional.